El pasado 28 de agosto, la comunidad agustina se reunió en el Convento de San Agustín, en el centro de Lima, para celebrar con devoción la solemnidad de nuestro Padre san Agustín, doctor de la Iglesia y guía espiritual de la Provincia de Nuestra Señora de Gracia del Perú.
La celebración eucarística fue presidida por Monseñor Carlos García Camader, obispo invitado, y concelebrada por Fr. Hernanis Díaz, OSA, prior provincial, junto con Fr. Nelson Pinzón, OSA, párroco de la parroquia Nuestra Señora de Gracia y consejero provincial. Frailes, laicos, directivos, colaboradores, miembros de fraternidades y feligreses participaron con entusiasmo, renovando juntos su compromiso con el carisma agustino.

Un corazón transformado por Dios
Durante su homilía, Mons. Carlos García Camader destacó la conversión de san Agustín, recordándonos que su historia sigue inspirando hasta la actualidad:
“El corazón de san Agustín, alguna vez inquieto y rebelde, fue transformado por la gracia de Dios. Hoy, en pleno 2025, su vida nos desafía a todos —obispos, sacerdotes, frailes y laicos— a dejarnos alcanzar por ese mismo amor y a vivir con pasión la búsqueda de la verdad.”
El obispo recordó uno de los momentos más decisivos en la vida de nuestro santo patrono: aquel instante de profunda crisis y discernimiento en el jardín, cuando, sintiéndose lleno de todo y vacío de nada, escuchó la voz que le decía: “Toma y lee”. Fue entonces cuando la Palabra de Dios iluminó su corazón y le reveló el camino a seguir.
Su testimonio nos recuerda que la transformación interior es posible cuando abrimos el corazón a la gracia y ponemos nuestra confianza en el amor de Dios.
Una comunidad unida en la misión
Antes de concluir la misa, Fr. Hernanis Díaz, OSA, prior provincial, dirigió un agradecimiento a toda la comunidad agustina: religiosos, miembros de las fraternidades agustinianas seculares, integrantes de los movimientos agustinos, directivos y colaboradores de las obras apostólicas.
“Gracias por compartir y mantener viva nuestra espiritualidad agustina, que nos une como comunidad y nos impulsa a seguir sirviendo con amor y esperanza”.








Tras la celebración eucarística, la comunidad se reunió en un almuerzo de confraternidad donde frailes, directivos de instituciones educativas, administradores de parroquias y colaboradores de la curia compartieron un momento de encuentro, unidad y fraternidad.
Durante este espacio también se celebró con alegría el cumpleaños número 92 del P. Agustín Crespo, un miembro muy querido de la comunidad del colegio San Agustín de Lima, cuya vida y vocación son fuente de inspiración para las nuevas generaciones.




La solemnidad de nuestro Padre san Agustín renovó en toda la comunidad el compromiso de buscar la Verdad, vivir la caridad y caminar juntos. Su ejemplo nos invita a seguir siendo “un solo corazón y una sola alma dirigidos hacia Dios”, fortaleciendo nuestra misión y nuestra identidad agustina.